Familia pierde todo por el huracán Hanna, pero logran rescatar a perritos

ESTADO

REYNOSA, TAMAULIPAS.- Tal y como era previsto, el Huracán Hanna ha causado estragos en diferentes regiones de la República Mexicana, sobre todo la zona noroeste donde la ciudad de Reynosa, Tamaulipas quedó sumergida bajo el agua debido a las intensas lluvias.

Sin embargo, podría decirse que en medio de la tormenta una buena noticia ha salido a relucir, se trata de una pareja de adultos mayores que se dieron a la tarea de rescatar perritos abandonados en peligro de morir ahogados por la inundación.

En una grabación se puede ver a ambos transportar a los animales en una tina, la cual no fue tan difícil de transportar ya que las calles están completamente cubiertas por el agua. El video se volvió viral en redes sociales en poco tiempo, desatando gran cantidad de reacciones y comentarios por parte de los internautas, quienes agradecieron el noble gesto de las personas.

 PESAR DE PERDER TODO, DECIDIERON AYUDAR
Por si fuera poco, más tarde se reveló en redes la triste historia que acompañaba a esta pareja, resulta que su hija, compartió a detalle la mala experiencia que estaban pasando debido a las fuertes lluvias. En una publicación de Facebook la mujer explicó que sus padres perdieron todo a causa del huracán, incluso aseguró que su cocina se cayó en pedazos.

«Lamentablemente perdieron todo, la cocina integral se les cayó a pedazos y por poco le cae a mi papá en la cabeza… pero la verdad no les importo al momento que vieron la inundación corrieron a poner a salvo a todos los nenes (perritos)».

Betty Vaquera, hija de los señores, comentó que cuando ellos despertaron la casa ya estaba llena de agua, de hecho se puede ver en una serie de imágenes como el agua acabó con todo. Asimismo agradeció a todas las personas que quisiera ayudar y anexó un número de cuenta para recibir la ayuda de los usuarios.

«Realmente mis papás están muy conmovidos por todos los lindos comentarios que están dejando. Le estaba leyendo a mi mamá los comentarios y ella lloraba de emoción», dijo Betty.